Staff by THECORE

Imágenes: Cortesía FUNO

Los Fideicomisos de Inversión en Bienes Raíces (Fibras) son instrumentos financieros que llegaron al mercado accionario mexicano en 2011. Son fondos de bienes raíces que tienen como función desarrollar, rentar, comprar o administrar un portafolio de propiedades en diversos segmentos, entre ellos industrial, residencial, centros comerciales, oficinas, hospitales, escuelas, hoteles, usos mixtos, etcétera.

De acuerdo con la Bolsa Mexicana de Valores (BMV), las Fibras son vehículos en los que a través de certificados de participación los inversionistas pueden invertir con una perspectiva de largo plazo y que sus recursos sean destinados al financiamiento para la adquisición o construcción de los inmuebles que la Fibra decida, para su arrendamiento y con el derecho a recibir ingresos de esos activos. Los certificados se compran y se venden en el mercado bursátil como cualquier acción de las empresas que cotizan en él.

Las fibras inmobiliarias debutaron en México en 2011, por lo que este 2021 cumplen 10 años. Hoy concentran una gran cantidad de propiedades, en especial de centros comerciales, áreas con un tránsito continuo de personas y gran dinamismo incluso, durante la reciente crisis sanitaria. 

¿Por qué se han mantenido activas, aun en los meses más críticos de la pandemia? Recordemos que las plazas comerciales son sitios con giros que no descansaron, como tiendas minoristas, farmacias y bancos. En este tenor, los centros comerciales y complejos de usos mixtos (que integran más de un tipo de segmento) comienzan a convertirse también en escaparate para el talento de artistas mexicanos. 

Pioneros en este sentido, FUNO (Fibra Uno) bajo la visión de André El-Mann ha impulsado iniciativas como Arte FUNO para promover la difusión cultural en sus inmuebles, los cuales se han convertido en punto de encuentro para algunas manifestaciones artísticas como pintura, fotografía y escultura.

Este año Arte FUNO reunió el talento de 20 artistas locales al mostrar su trabajo en sitios como Patio Toluca, Mercado Gourmet Parques Polanco, Midtown Jalisco, Pabellón Cuemanco y Uptown Juriquilla. De esta manera, los centros comerciales se han convertido en escaparates para mostrar el talento de exponentes mexicanos, tal fue el caso del escultor Gastón Gallardo quien fue el encargado de retratar la vida animal y su importancia en el planeta en la sede de Pabellón Cuemanco. La obra exhibida se caracterizó por piezas compuestas de residuos de diferentes metales como un oso de 2.20 metros de alto y un tigre de 1.80 metros de largo. 

Otra muestra artística se habilitó en Patio Toluca, donde la artista plástica Frida Sofía, originaria de Toluca, Estado de México, explora una visión del TEA (Trastorno del Espectro Autista) ofreciendo a los visitantes una mirada social del arte. Así, las iniciativas que logran conjuntar al arte y los espacios públicos como los centros comerciales, resultan ser una propuesta interesante para que estos últimos sean al mismo tiempo galerías que difundan el talento artístico local.